El pasado 27 de febrero, el terremoto que sacudió Chile provocó un empeoramiento en el sector del acero. Como consecuencia del seísmo, las dos grandes empresas del sector, la Compañía de Aceros del Pacífico y Gerdau Aza, han tenido que multiplicar las importaciones del metal al verse sus instalaciones dañadas por dicho desastre natural.
Según el Presidente de la Asociación de Industrias Metalúrgicas y Metalmecánicas (Asimet), habrá un incremento en el consumo de acero, basado en la experiencia del terremoto de 1985.
El Gerente General de Gerdau Aza opina que están pasando por una etapa de paralización, pero que en poco tiempo todo volverá a la normalidad.
Otro tema que preocupa a sector es la subida de impuestos; sin embargo, si esto ocurre así, se intentará a agotar todas las posibilidades para llegar a una buena resolución del problema.
Con la ayuda del Gobierno se podría llegar a un acuerdo y buscar el financiamiento adecuado, sin descartar la cuestión tributaria.
Una de las preocupaciones del Presidente de la asociación de Industrias Metalúrgicas y Metalmecánicas es el efecto que todo esto podría causar en las pequeñas y medianas empresas, aunque el Gobierno asegura que no se verán perjudicadas pues estas generan grandes beneficios creando empleo y actividad productiva, por lo que, si se modifican las leyes tributarias, estas se verían afectadas en gran medida.