El decreto promulgado por el Estado Mexicano rebajó la carga arancelaria que soportaban los lingotes de acero, en cuatro variedades diferentes, y alambre de acero, en dos clases distintas. Dichos productos pasaron a tributar 3 %, dos puntos porcentuales menos que antes. Además los lingotes no deberán pagar tributos de importación en el año 2013.
El objetivo del decreto es facilitar las tareas del comercio exterior, poner en sintonía los aranceles con socios comerciales y facilitar la proveeduría nacional de acero.
Las empresas que importan dichos productos desde Brasil y Venezuela, serán las primeras beneficiadas ya que dichos países son los principales abastecedores de las palanquillas y el planchón al mercado mexicano. Así dichos países sudamericanos se suman a Estados Unidos, Canadá, Eslovaquia y Alemania que ya gozaban de dichas rebajas por acuerdos económicos bilaterales.
Caso contrario ocurre con el aluminio, que ve como aumentan sus aranceles, dichos productos tienen ahora una carga impositiva que va del 3 al 5 %, anteriormente no tributaban. Dentro de los productos afectados se encuentran las barras de aleaciones de aluminio y chapas de aluminio sin alear y serpentines de aluminio sin alear y tubos de aluminio.
El Instituto de Mexicanos Ejecutivos en Comercio Exterior, estima que el decreto debe ser evaluado por un tiempo razonable para estudiar sus impactos sobre la economía y las siderúrgicas mexicanas.
El objetivo del decreto es facilitar las tareas del comercio exterior, poner en sintonía los aranceles con socios comerciales y facilitar la proveeduría nacional de acero.
Las empresas que importan dichos productos desde Brasil y Venezuela, serán las primeras beneficiadas ya que dichos países son los principales abastecedores de las palanquillas y el planchón al mercado mexicano. Así dichos países sudamericanos se suman a Estados Unidos, Canadá, Eslovaquia y Alemania que ya gozaban de dichas rebajas por acuerdos económicos bilaterales.
Caso contrario ocurre con el aluminio, que ve como aumentan sus aranceles, dichos productos tienen ahora una carga impositiva que va del 3 al 5 %, anteriormente no tributaban. Dentro de los productos afectados se encuentran las barras de aleaciones de aluminio y chapas de aluminio sin alear y serpentines de aluminio sin alear y tubos de aluminio.
El Instituto de Mexicanos Ejecutivos en Comercio Exterior, estima que el decreto debe ser evaluado por un tiempo razonable para estudiar sus impactos sobre la economía y las siderúrgicas mexicanas.