La firma Endesa piensa terminar las obras del gasoducto de Ibiza en el mes de septiembre. Con esto se llega a la finalización del proyecto que ha costado 15 millones de euros y el trabajo constante de más de 200 obreros.
Las obras actualmente se encuentran en la fase de instalación de los tubos en todo el trazado del gasoducto que conecta la península con Ibiza, previéndose para el mes de septiembre la construcción de las estaciones de regulación, que dará por concluidos los trabajos de esta obra de ingeniería. A partir de esa fecha, Endesa se convertirá en la operadora de explotación y transportista del gas del gasoducto.
Los detalles de la obra son los siguientes; tiene su cabecera en Alicante y en la playa de Cala Gració, incluye cinco estaciones, tres de ellas de posicionamiento y dos más de seccionamiento, derivación y medida.
Desde estas estaciones se alimentarán las redes de distribución de gas de Ibiza y la Villa de Portmany, así como la central eléctrica de Gesa.
El gasoducto que lleva 8 meses de construcción, está diseñado para una presión de servicio de 80 atmósferas, teniendo una capacidad de transporte de 520.000 metros cúbicos por hora, siendo su extensión en la isla 17,73 kilómetros de cañerías de acero al carbono soldado por resistencia eléctrica, de diez pulgadas (254 milímetros).