En 2025, Estados Unidos planea adquirir hasta 3 millones de barriles de petróleo para reponer su Reserva Estratégica de Petróleo (SPR). Esta iniciativa busca restaurar los niveles de la SPR después de las ventas récord de 2022, realizadas para estabilizar los precios de la gasolina en medio de la crisis energética global.
El Departamento de Energía (DOE) ha estado comprando petróleo a precios significativamente más bajos que los obtenidos durante las ventas de 2022, ahorrando millones de dólares para los contribuyentes estadounidenses. Además, el DOE ha cancelado ventas futuras de petróleo programadas por el Congreso, lo que permitirá preservar la infraestructura de almacenamiento de la SPR.
Sin embargo, para completar la reposición de la SPR, el gobierno estadounidense necesitará asegurar fondos adicionales del Congreso. Expertos advierten sobre los desafíos políticos que podrían surgir en este proceso.