País Vasco, España – La planta de Pierburg en el País Vasco de España, miembro del Grupo multinacional KSPG, ha finalizado la construcción de la primera válvula de recirculación de gases de escape 75000000º (EGR) en su línea de montaje.
La planta española de Pierburg se ubica como el centro principal de fabricación de dichas válvulas y desde 1994 cada año ha fabricado un promedio de alrededor de cinco millones de unidades destinadas a los motores de gasolina y diesel.
El trabajo de la válvula EGR es regular el cambio de ruta de los gases de escape en el motor. Este componente permite disminuir las emisiones de manera de cumplir con las normas de emisiones cada vez más estrictas de todo el mundo. Los coches con motor diesel a partir de la norma Euro 1 tienen un sistema de recirculación de gases de escape, y en los vehículos a partir de Euro 3 este sistema es obligatorio. A partir de Euro 4, el enfriamiento de los gases de escape de recirculación se ha convertido en cada vez más necesaria y a partir de Euro 6 la recirculación de baja presión se ha añadido a la variedad de alta presión. Dentro de este contexto, y en paralelo a la recirculación de gases de escape, las válvulas EGR se han desarrollado aún más como un accesorio imprescindible para las generaciones de motores del mañana.
La válvula EGR más reciente cuenta con un diseño de bajo peso muy compacto y desde 2013 se ha utilizado en los modelos de producción en serie de un importante OEM alemán.