Recientemente, surgió una nueva oportunidad para que KLINGER Brasil contribuya a un proyecto de energía verde en Rosana, São Paulo, donde Eudora Energia acaba de completar la primera planta de energía heliotérmica del país. La energía heliotérmica, también conocida como energía solar concentrada o CSP, convierte la energía solar en calor mediante el uso de espejos parabólicos y fluido térmico.
Los rayos del sol son reflejados y concentrados por los espejos en un único punto, que calienta el fluido térmico y produce vapor mediante intercambio de calor. Este vapor impulsa turbinas, que hacen funcionar un generador y producen electricidad. Eudora Energia, especialista en soluciones energéticas, comenzó a desarrollar esta tecnología en 2015.
Cuando Eudora estaba diseñando el proyecto de la planta, el equipo investigó el mercado de válvulas para conocer sus opciones para el control de fluidos. Una vez que se finalizaron las especificaciones exactas, se dieron cuenta de que las opciones eran limitadas: pocas empresas eran capaces de producir válvulas que cumplieran los estrictos requisitos necesarios para controlar el fluido térmico con la precisión necesaria para el proyecto. Su búsqueda los llevó a KLINGER, quien tenía un historial comprobado con el medio.
Después de consultar detalladamente con Lucas Hipólito, analista de proyectos de KLINGER Brasil, Eudora se decidió por las válvulas de globo de pistón KVN, que cuentan con sellado clase VI según los estándares ANSI/FCI, lo que garantiza un alto nivel de estanqueidad y confiabilidad. La alta durabilidad de las válvulas conlleva un mantenimiento menos frecuente y menos piezas de repuesto. Esto reduce los residuos y evita emisiones fugitivas, lo que ayuda a mantener el proyecto lo más ecológico posible. Otra característica clave fue la capacidad de las válvulas para ajustar los niveles de flujo, lo que le dio al equipo la capacidad de realizar ajustes granulares según fuera necesario sin tener que dejar el sistema fuera de servicio.