El Parque Nacional de las Marismas de Santoña, Victoria y Joyel recibirá una inversión de 9.4 millones de euros (135.047 millones de dólares) adjudicados por el Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino para la finalización de las obras del saneamiento en esa parte de Cantabria.
La empresa Copisa Constructora Pirenaica, S.A fue la ganadora de la licitación y la que llevará a cabo las obras para la recogida, tratamiento y evacuación al mar de las aguas residuales de las Marismas de Santoña.
Además, según la Dirección General del Agua, Copisa se encargará de las obras del
Colector interceptor general Santoña-Laredo. Tramo E.D.A.R. de San Pantaleón-Argoños.
El plan del proyecto prevé una red de colectores para unificar los vertidos de los actuales municipios que actualmente llegan al pretratamiento de Argoños y de esta manera dirigirlos hacia la Estación Depuradora de Aguas Residuales de San Pantaleón.
En dicha EDAR confluyen también los vertidos de los núcleos de Noja, Isla y Meruelo que luego pasan a una cámara de reparto, luego al emisario terrestre y finalmente al emisario submarino.
Una vez finalizado el proyecto se espera poder recuperar la calidad de las aguas de esta zona intermareal del litoral cantábrico mejorando el medio ambiente de un área de alta productividad biológica, zona de invernada y de paso para numerosas especies de aves migratorias.
La empresa Copisa Constructora Pirenaica, S.A fue la ganadora de la licitación y la que llevará a cabo las obras para la recogida, tratamiento y evacuación al mar de las aguas residuales de las Marismas de Santoña.
Además, según la Dirección General del Agua, Copisa se encargará de las obras del
Colector interceptor general Santoña-Laredo. Tramo E.D.A.R. de San Pantaleón-Argoños.
El plan del proyecto prevé una red de colectores para unificar los vertidos de los actuales municipios que actualmente llegan al pretratamiento de Argoños y de esta manera dirigirlos hacia la Estación Depuradora de Aguas Residuales de San Pantaleón.
En dicha EDAR confluyen también los vertidos de los núcleos de Noja, Isla y Meruelo que luego pasan a una cámara de reparto, luego al emisario terrestre y finalmente al emisario submarino.
Una vez finalizado el proyecto se espera poder recuperar la calidad de las aguas de esta zona intermareal del litoral cantábrico mejorando el medio ambiente de un área de alta productividad biológica, zona de invernada y de paso para numerosas especies de aves migratorias.