México. El catálogo de Balluff se ha ampliado recientemente con la inclusión de unos nuevos sensores autónomos de modo opuesto, fabricados en acero inoxidable y capaces de resistir a refrigerantes y lubricantes. El producto se presenta en anchos de 50 y 80 milímetros.
La nueva línea de sensores fotoeléctricos de horquilla ahora incluye los sensores autónomos de modo opuesto, de acero inoxidable con clasificación IP69K, diseñados para ambientes difíciles. Los sensores incluyen una carcasa de acero inoxidable 316L que es capaz de resistir a las más agresivas soluciones de limpieza, así como también a los refrigerantes y los lubricantes. La protección que proporciona dicha carcasa convierte a los sensores en una opción ideal para las metalúrgicas, así como también para las automotrices o las fábricas de perfilado de metales, entre otras aplicaciones.
Balluff es una fabricante que ofrece soluciones para la automatización y se especializa en la producción de sensores y sistemas para medición de desplazamiento, identificación, reconocimiento de objetos y medición de fluidos, además de conectividad, redes y una gran variedad de accesorios. Cuenta con más de 90 años de presencia en el mercado, y un amplio alcance internacional. Posee filiales en España, Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México y Venezuela, entre otros países alrededor del mundo.