Ingurubide, el centro de recursos de Bilbao fue el lugar elegido por Honeywell para exponer la eficiencia energética en las instalaciones centralizadas de calefacción. Según la empresa con sede en EU.UU, con sus productos se logra ahorros de hasta el 35 %, un mayor confort para los usuarios, y un reparto equitativo de costes de uso y mantenimiento. Los mismos cuentan con avanzados desarrollos en medición y repartos de consumos en la climatización térmica.
La firma se adelanta así a la nueva directiva del parlamento europeo que obligará a todos los edificios con calefacción central a instalar contadores de consumo individuales antes del año 2017.
El gran número de instalaciones centralizadas de calefacción que existen en España es un serio problema, ya que la distribución de calor se realiza por columnas verticales, sin que exista una separación por viviendas. Este sistema hace que el reparto de calor no sea uniforme en todas las viviendas; halla un alto consumo energético; falte confort en muchas viviendas y un sistema ineficaz e injusto de reparto de los costes entre los propietarios.
La ventaja del sistema que propone Honeywell es que no son necesarias nuevas obras en la edificación ya que se centra en modificaciones hidráulicas en la instalación, nuevas válvulas, un sistema de control individual, separación de los costes de calefacción y un sistema de control para sala de calderas.
En Ingurubide se pudieron ver diferentes válvulas, detentores y cabezales termostáticos Honeywell que permiten el control de la temperatura ambiente, garantizando confort y ahorro energético.
Tanto las válvulas como los cabezales termostáticos Honeywell son fabricados conforme con la norma UNE EN 215:2006.