Minera Aratarí planea realizar una inversión de 1.500 millones de dólares (1.095 millones de euros) en su mina de Uruguay para el año 2011. Es uno de los proyectos más importantes de inversión en dicho país sudamericano después del de la papelera Botnia. El proyecto plantea un desarrollo global del mismo, con un alto impacto en la sociedad en la cual se inserta.
Los planes de la compañía para los próximos años pretenden desarrollar el proyecto Aratarí siempre basándose en la cantidad de hierro que pueda brindar la mina y que respalde económicamente dicha inversión. Esta mega-inversión comprende, además de los aspectos mineros, la construcción de un puerto en la Laguna Merín, que separa Uruguay de Brasil o en el océano Atlántico, todo depende de los estudios de prefactibilidad y un mineroducto ferroviario para trasladar el mineral de hierro.
La mina se verá beneficiada con la instalación de una central generadora de energía eléctrica semilimpia, que combinaría combustibles como la biomasa, el carbón y granjas eólicas que aprovecharían el importante flujo de viento del este uruguayo.
Este aspecto es muy importante ya que el proyecto de Aratarí plantea un especial énfasis en el cuidado medioambiental ya que se pretenden respetar los estándares que exige el Banco Mundial.
Los yacimientos que explora Aratarí en la actualidad son el de la mina Valentines en Treinta y Tres donde se realizan perforaciones con el fin de determinar el potencial productor de hierro de la mina y también otras exploraciones en los departamentos de Florida y Durazno en los que se busca el hierro. No se ha comentado aún, pero puede entrar en dicho proyecto el yacimiento inexplorado en la actualidad de dolomita de Mina Valencia, situado a pocos kilómetros de Valentines, y por el que hay varios interesados a nivel mundial a causa de la pureza del mineral, hecho que la convierte en la mejor mina de dolomita del mundo.
Los planes de la compañía para los próximos años pretenden desarrollar el proyecto Aratarí siempre basándose en la cantidad de hierro que pueda brindar la mina y que respalde económicamente dicha inversión. Esta mega-inversión comprende, además de los aspectos mineros, la construcción de un puerto en la Laguna Merín, que separa Uruguay de Brasil o en el océano Atlántico, todo depende de los estudios de prefactibilidad y un mineroducto ferroviario para trasladar el mineral de hierro.
La mina se verá beneficiada con la instalación de una central generadora de energía eléctrica semilimpia, que combinaría combustibles como la biomasa, el carbón y granjas eólicas que aprovecharían el importante flujo de viento del este uruguayo.
Este aspecto es muy importante ya que el proyecto de Aratarí plantea un especial énfasis en el cuidado medioambiental ya que se pretenden respetar los estándares que exige el Banco Mundial.
Los yacimientos que explora Aratarí en la actualidad son el de la mina Valentines en Treinta y Tres donde se realizan perforaciones con el fin de determinar el potencial productor de hierro de la mina y también otras exploraciones en los departamentos de Florida y Durazno en los que se busca el hierro. No se ha comentado aún, pero puede entrar en dicho proyecto el yacimiento inexplorado en la actualidad de dolomita de Mina Valencia, situado a pocos kilómetros de Valentines, y por el que hay varios interesados a nivel mundial a causa de la pureza del mineral, hecho que la convierte en la mejor mina de dolomita del mundo.